
Consejos para estimular el desarrollo motor en niños de 2 años
Descubre cómo estimular el desarrollo motor grueso en niños de 2 años a través de juegos seguros y actividades divertidas. Aprende qué esperar en esta etapa y cómo apoyar su crecimiento físico y autonomía con nuestros consejos prácticos. ¡Lee y a jugar!
A los 2 años, tu pequeño(a) empieza a explorar el mundo corriendo, saltando y trepando. ¡Una etapa llena de energía y descubrimientos! A esta edad, la autonomía en el movimiento crece rápidamente, abriendo nuevas oportunidades para el aprendizaje y la interacción. Esta guía te acompañará para entender y apoyar el desarrollo motor de tu hijo(a) de 2 años, desde perfeccionar sus habilidades básicas hasta fomentar nuevas aventuras.
¿Qué son las habilidades motoras gruesas?
La motricidad gruesa es un aspecto crucial del desarrollo infantil y se refiere a la capacidad de controlar y coordinar los músculos grandes del cuerpo para realizar movimientos amplios. Estas habilidades incluyen acciones como caminar, correr, saltar, trepar, lanzar, patear y mantener el equilibrio.
Diferencia entre la motricidad gruesa y fina
Como vimos recién, la motricidad gruesa se refiere a la movilidad coordinada de las principales partes del cuerpo. La motricidad fina, en cambio, se refiere al desarrollo y control de los músculos pequeños de las manos, los dedos, los pies y la cara, lo cual es útil para tareas como sostener un lápiz para escribir o dibujar, atarse los cordones de los zapatos y manipular objetos pequeños. Ambos tipos de motricidad son fundamentales para el desarrollo integral del niño.
Principios psicofisiológicos de la motricidad gruesa
El desarrollo de la motricidad gruesa sigue dos principios psicofisiológicos importantes:
- Céfalo-caudal: Este principio describe el desarrollo que progresa de la cabeza hacia los pies. Los bebés primero aprenden a controlar los movimientos de la cabeza, luego el tronco y finalmente las piernas y los pies.
- Próximo-distal: Este principio se refiere al desarrollo que avanza desde el centro del cuerpo hacia las extremidades. Los niños primero desarrollan el control de los hombros y las caderas antes de lograr la destreza en brazos, manos y piernas.
Evolución de la motricidad gruesa
Aunque el ritmo de desarrollo varía en cada niño, generalmente la evolución de la motricidad gruesa según su etapa de crecimiento es la siguiente:
- A los 3 meses se da la vuelta de manera premeditada.
- A los 4 meses logra controlar el peso de su cabeza.
- A los 6 meses se sienta sin ningún apoyo, pero con ayuda.
- A los 8 meses ya puede hacerlo sin ayuda.
- Empieza a gatear entre los 6 y 10 meses.
- Se mantiene de pie con ayuda hacia los 12 meses.
- Da sus primeros pasos sin apoyo, aproximadamente entre los 12 y 13 meses.
El desarrollo motor a los 2 años: ¿qué esperar?
A los 2 años, los niños han alcanzado hitos importantes en su desarrollo motor grueso y continúan refinando sus habilidades. Generalmente, a esta edad puedes esperar que tu hijo(a):
- Corra con más coordinación, aunque todavía pueda tener un poco de torpeza.
- Salte con ambos pies, aunque al principio pueda ser más un "brinco".
- Suba y baje escaleras con ayuda, agarrándose de la barandilla o de tu mano.
- Lance una pelota con cierto control, aunque la precisión aún esté en desarrollo.
- Patee una pelota hacia adelante.
- Se ponga de puntillas.
- Comience a mantenerse en equilibrio por unos segundos sobre un pie.
Es importante recordar que cada niño se desarrolla a su propio ritmo. Sin embargo, si tienes preocupaciones sobre el desarrollo motor de tu hijo(a), especialmente si muestra retrasos significativos en estas áreas, no dudes en consultar con su pediatra para descartar cualquier posible problema y recibir orientación profesional.

Importancia de la motricidad gruesa
Fomentar la motricidad gruesa en los niños tiene numerosas ventajas para su desarrollo integral:
- Desarrollo cognitivo y emocional: Al moverse y explorar, los niños estimulan su atención, concentración y memoria. El movimiento también libera endorfinas, mejorando su estado de ánimo y bienestar general.
- Desarrollo social e interacción: Participar en actividades físicas con otros niños fomenta el trabajo en equipo, el respeto por los turnos y la comunicación efectiva, habilidades sociales cruciales.
- Exploración y autonomía: Una buena motricidad gruesa permite a los niños explorar su entorno de manera más independiente, lo que impulsa su curiosidad y autoconfianza.
- Fortalecimiento físico: El movimiento activo fortalece los músculos, mejora el equilibrio, la coordinación y la postura. Además, adquieren nuevas destrezas físicas.
Actividades para fortalecer la motricidad gruesa
A los 2 años, el juego activo es la principal forma en que tu hijo(a) continúa fortaleciendo sus habilidades motoras gruesas. Existen muchas actividades divertidas que puedes realizar con tu pequeño(a) para desarrollar su motricidad gruesa:
- Bailar.
- Carreras y persecuciones.
- Saltar en trampolín, sobre pequeños obstáculos o simplemente en el mismo lugar.
- Monopatín, bicicleta o triciclo sin pedales. Siempre bajo supervisión y equipo de seguridad.
- Juegos de pelota como lanzar, atrapar y patear.
- Juegos de burbujas: correr para alcanzarlas, saltar para explotarlas.
- Juegos en el parque (columpios, subir escaleras, toboganes, trepadores).
- Caminar sobre líneas o senderos marcados para mantener el equilibrio.
- Imitar movimientos de animales.
- Circuitos de movimiento sencillos: gatear por un túnel, saltar sobre una almohada, lanzar una pelota a un cesto.

Qué considerar para un desarrollo motor saludable a los 2 años
Es importante tener en cuenta algunos aspectos para asegurar un desarrollo motor óptimo a esta edad:
- No limites demasiado el movimiento: Dale un entorno amplio y seguro, permite que tu pequeño(a) pueda correr, saltar y moverse libremente, tanto en interiores como en exteriores. Ofrécele diferentes tipos de superficies para que experimente al caminar y correr como césped, arena, alfombras.
- Ofrece una variedad de actividades: Exponerlo a diferentes tipos de movimiento ayuda a desarrollar una gama más amplia de habilidades motoras.
- Evita la comparación con otros niños: Cada niño se desarrolla a su propio ritmo. Enfócate en el progreso individual de tu hijo(a).
- Asegura un descanso adecuado: El sueño es crucial para el desarrollo general, incluyendo el motor.
- Fomenta una nutrición equilibrada: Una buena alimentación proporciona la energía y los nutrientes necesarios para el crecimiento y la actividad física.
Durante los primeros años de vida, los pequeños experimentan un rápido desarrollo físico y cognitivo, y las habilidades motoras son esenciales para su exploración del entorno y su interacción con el mundo que les rodea. Acompáñalo(a) con entusiasmo, paciencia y ofreciéndole oportunidades seguras para practicar y desarrollar sus habilidades motoras. Cada carrera, cada salto y cada intento son pasos importantes en su camino hacia una mayor independencia y un desarrollo físico saludable. ¡Disfruta de esta etapa tan activa!
Fuentes:
Díaz, L. M. (2020). Mundo Primaria. Obtenido de Mundo Primaria: https://www.mundoprimaria.com/blog/motricidad-gruesa
Gabinete de Logopedia en Valladolid. (20 de Septiembre de 2021). Fonema.
Morin, A. (2019). Understood. Obtenido de Understood: https://www.understood.org/es-mx/articles/actividades-motricidad-gruesa-ninos
Sánchez, E. (15 de Diciembre de 2021). Psicología y Mente. Obtenido de Psicología y Mente: https://psicologiaymente.com/desarrollo/motricidad-gruesa#google_vignette